Un placer botánico

No saber qué planta es. Con el añadido de la dificultad de los dientes de león, esas flores amarillas que prosperan en prados y rocas de montaña. Este es suficiente aliciente para detenerse gustosamente un mal día de agosto, de esos que nos regalan las montañas, en este caso el Pirineo francés. Con lluvia, nieblas y nueve grados. De debajo del chubasquero uno saca la cámara, y rápidamente hace algunas fotos, luego toma unas hojas y una florecilla.

Fue un corto paseo por los alrededores de la estación de esquí Piau Engaly a 1.850 metros. Unos minutos para conocer la fealdad de una estación de esquí, con unos edificios que envejecen mal, cables, hierros y estructuras esparcidas por una amplia zona. Un gran destrozo en busca de beneficio. Y yo beneficiándome de la carretera de acceso y sus aparcamientos, lo reconozco. Un día cubierto, que no dejaba ver el fantástico paisaje de estas montañas. Ateridos, Miguel y yo solo merodeamos por los alrededores, no nos adentramos en el valle desconocido y no llegamos al lago glaciar de Badet. Unas cuantas fotos más, incluidas las bellas angélicas que carretera abajo, junto al bosque, crecían tan fotogénicas, tan vigorosas. 

Pero aquel paseo y las hojas y la florecilla, conservada en un libro, y las fotos y los escasos recuerdos se convertirían en estas gustosas tardes de febrero, dedicado a buscar el nombre de las plantas veraniegas, a devanarme las entendederas para saber qué Hieracium se había cruzado aquel día brumoso en mi camino. Así que atento a su vello largo y cano, y también glandulífero, sus lígulas amarillas y su modesta talla, creo que me llevan a pensar que se trata de Hieracium lawsonii, o al menos a la sección cerinthoidea del género Hieracium. Estudiar esas plantas es penetrar en su intimidad y aquel fue un buen paseo. No hay día malo en Pirineos, porque están en mí.

Jacobaea adonidifolia antes Senecio adonifolius

Cirsium vulgare

Scleroderma citrinum

Lactuca plumieri antes Cicerbita plumieri

Hieracium lawsonii

Epilobium angustifolium

Angelica silvestres

Rosa villosa